miércoles, 14 de noviembre de 2007

11 de Noviembre: Día del Asistente Social.




Casi tengo 20 y 10 años, y cumplí 6 años de ejercicio de la profesión. Cuando comencé a estudiar estaba llena de ilusiones y miedos, sólo recuerdo que mi padre me dijo: estudia Servicio Social, y acepté. Hoy gran parte de mi vida gira en torno a mi profesión, aunque aveces pienso que mi única profesión es ser soltera.
Cuando uno dice soy Asistente Social las personas no tienen muy claro que es lo que se hace en la práctica, aparte de la Visita Domiciliaria y del famoso Informe Social (la primera una técnica de recolección de información y la segunda un diagnóstico), pero hoy comparto con ustedes el siguiente mensaje del ASISTENTE SOCIAL:

Empieza tu jornada con la mente clara y el corazón limpio. Si llevas desaliento o amargura contigo, tus manos irán vacías.

El aporte sereno y el gesto afable sean tu único escudo en el diario luchar.

Pon sobre tu corazón el sello de la Justicia y de la Comprensión. No halla en tu camino problemas de solución, dolor, que no puedas aliviar, ni la vida de encauzar.

Tu palabra clara y tu acción eficaz, pondrán paz sobre la discordia, serenidad en el hogar que se derrumba, confianza en los ojos que imploran y la luz de esperanza en la mente que sufre.

SERVICIO SOCIAL, es amor, es sacrificio, es don de sí mismo. Elegiste un camino difícil, pero el cielo te dio su más hermoso don: puedes dar.

Cada día puedes dar algo: una palabra de aliento....una sonrisa...una esperanza...una solución. No escatimes este don.

Sé faro, luz y guía.

En las horas desconcertantes del dolor, que tu mano sea firme y tu palabra generosa.

Y así, al final del día, cuando el cansancio cierre tus ojos tras dura jornada, sabrás por qué tu noche se ha poblado de estrellas.


Este mensaje fue un regalo del Colegio de Asistentes Sociales de Puerto Montt, cuando cumplía tan solo un aniversario como Asistente Social.
Ayer, recibí una gran sorpresa: en una visita al Club Adulto Mayor Millaray de La Unión me esperaban con un hermoso ramo de flores, un coro de voces que entonaban boleros, y un brindis con borgoña y cositas ricas preparados por ellos. Los Adultos Mayores de este grupo fueron los únicos en darme un presente por mi día, y me llenó de alegría el corazón....quizás quiere decir que la lucha diaria que llevo por cumplir con mi función no ha sido en vano...




1 comentario:

eugenia dijo...

carolita, eres una hermosa persona interior y exteriormente (aunque no me tienes en tus preferencias) Tienes en gran parte razón al menudear cada ejemplar de macho, pero entre 100 siempre hay uno que reune los requisitos que desea la mujer (cada oveja con su pareja)